jueves, 3 de marzo de 2011

Necesitamos un gobierno que nos trate como adultos

En plena tempestad de declaraciones de los comunicadores gubernamentales –acuérdense que tenemos un gobierno de comunicadores, según nos explicaron en la última remodelación del mismo- sobre medidas de ahorro energético, hemos conocido ayer las cifras del paro registrado de febrero. Vamos mejorando, ha llegado a insinuar alguna de las subordinadas del comunicador del paro, Valeriano Gómez. Dice que la subida es menor que en años anteriores y se queda tan tranquila. Triste consuelo, sobre todo para los parados, que ya son un 4,08% más que el año pasado y que alcanzan la cifra de 4.299.263 personas con nombre y apellido, no una cifra estadística sobre la que se pueden hacer elucubraciones y explicaciones propias de un niño pequeño cogido “in fraganti” en una travesura. Y el número de afiliados a la Seguridad Social disminuyendo para no variar.

Esto ya se veía venir, pero aquí estamos jugando a distraernos una vez más, tal y como ya he denunciado en este blog en más de una ocasión. Y además es que ni saben hacerlo a pesar de todos los expertos en propaganda y comunicación que tienen. Es tal el afán de protagonismo de alguno de nuestros ministros que no se cortan ni un pelo a la hora de hacer el ridículo. Seguro que piensan que para lo que les queda en el convento por lo menos van a tener su minuto de gloria televisivo, que lo “importante es que hablen de uno, aunque sea mal”, según la frase atribuida originalmente a Oscar Wilde.

Es cierto que tenemos que ahorrar energía. Tan imprescindible y tan cierto como que en el tema de políticas energéticas no hacemos nada más que dar bandazos y aplicar recetas “ideológicas” aunque sean contrarias a la opinión de los expertos en la materia. Pero eso no justifica los anuncios y contra anuncios continuos de nuestro Gobierno. El petróleo que recibimos de Libia no supera el 13% de nuestras importaciones y países como Italia y Francia dependen más que nosotros de ese país y no diseñan políticas de ahorro improvisadas y de gran resonancia mediática y poca efectividad. Menos aún si se contradicen en el plazo de horas y están tomadas sin ningún estudio técnico previo.

¿Por qué no se tomaron hace dos años cuando el precio del barril de crudo estaba a 150 dólares? Ah, ya. Ahora me acuerdo. Entonces no había crisis, nuestro sistema financiero era el mejor del universo y si los países donde realmente había crisis adoptaran una salida social a la misma el mundo sería mejor y habría menos pobres.

Se le ocurre al desertor del Ayuntamiento de Madrid –no hay que olvidar que después de su estrepitosa derrota ante Gallardón a pesar del juego sucio que mostró, Sebastián no llegó a tomar posesión de su acta de concejal- cambiar todas las bombillas de las ciudades de España y cifra el ahorro en un 42%. Me pregunto si todos los ayuntamientos conocen cuantas farolas tienen; estoy convencido que no todos ni mucho menos. Ese 42% suena a una ocurrencia del momento. Me pregunto también porque no se han ido cambiando progresivamente las bombillas de esas farolas por otras de bajo consumo. Se nos dijo hace tiempo que se estaba haciendo y es verdad que en Madrid se han renovado muchas farolas por tecnologías de ahorro energético, -y de paso las calles donde se han instalado están menos iluminadas- y en otras ciudades, como Toledo, también se ha ido haciendo.

Luego dirán que hay tertulias televisivas nocturnas que dicen barbaridades. Pero es que se lo ponen muy fácil. Es para pensar mal que se proponga cambiar todas las bombillas de España de golpe. Si difícil es cuantificar el ahorro producido cuando no se saben las que existen, no es más fácil saber que la inversión necesaria para cambiar las luminarias –acompañadas necesariamente del recambio de las farolas en muchos casos- es inmensa. ¿Quién la va a pagar? Porque tan pronto se dice que el Ministerio de Industria y al rato que los Ayuntamientos. ¿Con qué dinero? ¿Con fondos como los de los EREs de Andalucía? ¿O es que Zapatero para su viaje por Oriente Medio y su peculiar propuesta de "plan Marshall privado" ha contactado con empresas expertas en el cambio de bombillas? Aclaro que todo esto es ironía porque, espero no equivocarme, lo que se trata es de distraernos y hurtar el debate de las cosas serias y preocupantes. No es que el ahorro energético no sea cosa seria. No lo es la manera de encararlo que tiene el Gobierno.

¿El plan E no contempló actuaciones de este tipo? Seguro que sí, como también recogía el impulso del vehículo eléctrico y el ahorro energético en edificios públicos. ¿Se llevaron a cabo y, por tanto, las propuestas actuales son un mero ejercicio de distracción y propaganda, o es que se vendió solo palabrería cuando se anunciaron las políticas medioambientales del citado plan E? Que yo tenga noticias, la única Administración Pública que cierra y corta la energía eléctrica y la climatización a las cinco de la tarde es el Ayuntamiento de Madrid.

Se anuncia y se desmiente con explicaciones que son para extraterrestres la limitación de la iluminación en carreteras. La de velocidad en autovías y autopistas se acompaña de reducción del precio del billete de cercanías. En dos palabras, más propaganda, porque el grueso del uso de las cercanías está en Madrid y Barcelona y en la capital más del 90% de los usuarios usan el abono del Consorcio de Transportes y, por tanto, no les afecta esa bajada. Y en Barcelona la Generalitat ya ha dicho que a ver si lo aplican porque nadie ha contado con ellos y que una vez que le sacaron la transferencia de ese transporte ferroviario a Zapatero este ya no es competente para fijar sus tarifas. Es decir, más propaganda y, ojalá, que no más gasto público si ahora le sacan los catalanes el importe del descuento en los billetes y un poco más por los trámites administrativos para aplicarlos; tiempo al tiempo.

Como pueden Vds. mismos deducir lo que se trata es de intentar distraernos y no tratarnos como adultos y lo del paro, el IPC, la subida del Euribor, la falta de crédito a las PYMES y hogares, etc. como si no tuviera mayor importancia. Al fin y al cabo ha dicho el Secretario de Estado de Economía que hay que ahorrar menos y gastar más, que tenemos mucho patrimonio y, por tanto, somos ricos. Que se lo pregunten a los parados y a Cáritas, que de esto sabe bastante.

Los españoles necesitamos un gobierno que nos trate como ciudadanos responsables –que lo somos- y que se dedique a hacer política seria y pensando en el futuro. Cuando empiece a tratarnos así nunca más nadie tendrá que hacer el comentario que escuché hace ya más de treinta años y que reseño en el último párrafo de este post y que oí al inicio de la Transición, de la que siempre ha renegado Zapatero y que ahora ha ido a vender a Túnez. Ya podía aprender nuestro presidente de los tunecinos y dimitir de una vez y así, de paso, podríamos tener un gobierno de personas –hombres o mujeres- preparadas, serias, responsables, con sentido del ridículo y dedicadas a gobernar, no a inventos propios del profesor Franz de Copenhague del TBO. Y de paso, ahorraremos energía por la cuenta que nos tiene.

En aquella época hubo una importante sequía –una de tantas- en España y me acuerdo que estando de guardia en un hospital coincidí en la cena con un prestigioso médico formado en el Reino Unido. No se me olvidará nunca. Dijo que si en Inglaterra la autoridad competente pedía que se ahorrara agua por una hipotética sequía los ciudadanos dejarían de tomar hasta el té de las cinco si la situación fuera crítica. Aquí diríamos –y en aquel entonces se decía- “que ahorre Suárez”, concluía el colega que durante toda su vida tanto añoró su etapa británica. Afortunadamente considero que las cosas han cambiado y que el vivir en una sociedad democrática nos ha hecho adultos, aunque el gobierno de Zapatero piense que no. Tal vez por eso adopta medidas con casi idénticos argumentos que hacía el de Franco presidido por Carrero Blanco en 1973.

Pemeches Juspi

pemechesjuspi@gmail.com

2 comentarios:

  1. Después de leerte sobre el ahorro energético, me pregunto en que querrá Campa que gastemos nuestro inmenso patrimonio. En gasolina...NO. En electricidad...NO. La verdad es que tenía entendido que de lo que pagábamos de gasolina, una gran parte eran impuestos para el Estado. ¿Habrá detraído ese montante la señora Salgado a la hora de hacer los cálculos del ahorro?. Si es que no, estarán en su línea habitual de inutilidad. Y si es que sí, tiene delito que nos estén mintiendo y entreteniendo.
    Además, si todos los ciudadanos hemos contratado a estos trabajadores(me refiero al Gobierno, por si no está claro), y son unos inútiles que nos llevan a la ruina a la empresa(España), pues se les despide, y ya está. Que de los ERE, ya se encargan ellos.

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  2. Gracias anónimo por tu comentario. Creo que, como muy bien apuntas, están en su linea habitual de inutilidad y progresando adecuadamente en ella.

    Después de haber oido anoche en una tertulia del canal 24 horas de TVE al director de un medio de comunicación de izquierdas -aunque la dignidad de la mujer no vaya con el medio- que habría que empezar a pensar si los poderes económicos estaban impidiendo la recuperación económica en lo que podriamos denominar golpe de estado económico, ya me creo cualquier cosa.

    Otro tertuliano dijo que no entendía tanto revuelo con el paro, que todos sabiamos que iba a aumentar y en marzo más. Que solo son dos millones, porque los otros son estructurales.
    Así que creo que, también, nos están entreteniendo.

    Efectivamente, tal y como dices, tenemos que despedir a estos empleados inútiles, despilfarradores e incapaces que tenemos, sobre todo al capataz. El problema es que de los ERES -como se ha demostrado en Andalucía y tu mismo dices- se encargan ellos mismos y parece que les viene mejor empezar a cobrar los dos años de indemnización a partir de abril de 2012. El capataz para toda la vida, que para algo tiene un grado mayor que el resto de nuestros empleados; de todas formas no me importaría que la oficina a la que tiene derecho se le montara en cualquier parte del mundo con tal de que acelarara el ERE

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