Ayer la noticia se daba a conocer en medio de la euforia general: el Tesoro había logrado colocar toda la deuda emitida e incluso la demanda había superado la oferta. Creo que todos debemos darnos la enhorabuena porque es un excelente dato.
Tan excelente como cuando en un grave accidente se logra reimplantar una mano. El resultado de la operación puede haber sido excelente, pero hay que esperar un largo periodo de tiempo hasta conocer la evolución y saber cuál va a ser la función de esa mano reimplantada, eso sin descartar la existencia de infecciones o trombosis en el postoperatorio.
Creo que este ejemplo, sin duda fruto de mi deformación profesional, explica cuál es la situación al día de hoy de nuestro principal problema económico. Yo me preguntaría, de entrada, que papel han jugado los que Zapatero denomina “especuladores” en la “espectacular” remontada del IBEX 35 en los dos últimos días. Porque pudiera ser que los que estaban invirtiendo en posiciones bajistas hayan decidido recoger beneficios e impulsar las compras y muchos hayan ido detrás cegados por la avaricia.
Hay una considerable cantidad de inversores que, entre todos, hacen millares de operaciones intradía y arrastran a incautos. No hay más que leer algunos foros para darse cuenta de cuál es la avaricia humana y como, a pesar de estrellarse una y otra vez, repiten; como los jugadores de los casinos. A ver qué ocurre en los próximos días, pero algunos inversores de la tipología que acabo de describir pueden pasarlo mal, sobre todo si han comprado a crédito.
El caso es que el resto de las bolsas europeas no ha acompañado a la española y eso no tiene buena pinta. Yo preferiría un crecimiento del PIB como el alemán en 2010, el 3,6%, a que el IBEX 35 sea el mejor índice en el año; entre otras cosas porque llevamos solo 9 días de cotización.
Pero es que esa excelente noticia hay que matizarla. Como en el caso del reimplante de mano, si han pasado más de seis horas desde la amputación el riesgo de complicaciones y de que el resultado final no sea favorable es mayor que si solo hubieran transcurrido cuatro, y esos son matices que cuando se publica una noticia así no se suelen resaltar.
Y en la noticia de la subasta de la deuda ayer hay dos matices fundamentales. El primero que se ha colocado con un interés muy alto, a un marginal del 4,59%, el mayor desde 2008 y un 27% más que en la última emisión. Comparativamente, a un interés menor que Grecia, ya rescatada, que ha colocado su deuda al 4,9% y bastante por debajo del de Portugal, que lo ha hecho al 6,71% y también con una demanda disparada, al igual que ha ocurrido en España.
Y el segundo matiz es que el diferencial con el bono alemán es cierto que se ha reducido ayer, pero está a 231 puntos básicos. Hace un año esa diferencia era de 88 puntos básicos, nos parecía una barbaridad y el secretario de estado de Economía decía por entonces, para tranquilizar a los mercados, que teníamos “sol y playa” y que eso era una ventaja añadida sobre otros países.
Si en 2010 preocupaba ese diferencial de 88 puntos, ¿por qué ahora estamos tan eufóricos? Siguiendo el mismo ejemplo médico, es posible que estén administrándonos corticoides –que son euforizantes- a grandes dosis, con diversas formas galénicas, tales como: tregua de ETA, alejamiento de la convocatoria de huelga general, cesión a los sindicatos en las causas de despido por pérdidas temporales, intento de acuerdo con los sindicatos en la negociación con las pensiones y repitiendo machaconamente la fecha del 28 de enero y olvidándose de que luego necesita tramitación parlamentaria, etc.
Nunca me alegraría tanto de que se me acusara con razón de agorero, pero ya hay titulares en los medios tan llamativos como este: “muchos cohetes para tan poca fiesta”. En cualquier caso, por el bien de España, que es el de Vds. y el mío, ojalá sea yo un agorero y un pesimista irredento.
Por cierto, hablando de noticias de ayer, si hubieran condenado al número dos de un candidato del Partido Popular ¿la noticia hubiera tenido la misma repercusión que la que, por ahora, está teniendo la de la ex alcaldesa de Torrejón de Ardoz?
Pemeches Juspi
pemechesjuspi@gmail.com
Queremos expresar comentarios sobre temas de actualidad e ideas sobre como nos gustaría que fueran las cosas en España
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Las analogías médicas que utilizas son un poco decepcionantes. Será que ni has prescrito muchos corticoides ni tienes mucha idea de la complejidad de reimplantar una mano. Por lo demás, tienes razón, España va mal. Pero nos salvará algo que nada tiene que ver con lo bien o mal que lo haya hecho ZP, que creo que era un iluminado al que han leído la cartilla. El asunto es que si España cae, Europa se rompe y a nadie le interesa. Pero viviremos de rodillas una temporada.
ResponderEliminarCuchillero
Gracias Cuchillero por tus comentarios. Siento que las analogías resulten decepcionantes. Todo es opinable y bienvenidas tus opiniones. De la complejidad de reimplantar una mano algo sabía, empezando por los trabajos de Kleinert y Urbaniak, pero es verdad que con el tiempo y la creación de unidades de reimplante todo se olvida, aunque estos olvidos sin duda son beneficiosos para los que sufren esas desgraciadas amputaciones.
ResponderEliminarEn cuanto a los corticoides efectivamente no he prescrito muchos a dosis altas, que es cuando producen efectos euforizantes, estando descrita desde las primeras ediciones del Velázquez la psicosis corticoidea. Incluso en las fichas técnicas y prospectos que pueden encontrarse en la web de la Agencia Española de Medicamentos se encuentran descritos estos efectos
En cuanto a poner esta analogía, que te acepto puede ser desafortunada, era por el hecho de que, al contrario que en la reimplantación de un dígito, en la de la mano completa conviene hacer primero dos o tres anastomosis venosas antes que las arteriales. Para poder salir de la crisis primero tenemos que drenar (evacuar, eliminar, etc) las causas que nos han llevado a ser los casi los últimos de la UE-15.
En lo demás coincido contigo.
Saludos
De la complejidad de reimplantar una mano sólo sabe un cirujano entrenado para ello. Otra cosa es gestionar el proceso, que siendo muy complejo también, es algo muy diferente. Yo no me dedico a esa especialidad pero ya veo que tú sí porque argumentas con detalles técnicos que sólo alguien experto en esa cirugía comprende plénamente. Siendo de otra manera y opinando desde la arrogante ignorancia de quien no es experto, ni lo ha hecho nunca y lo conoce porque se lo han explicado o lo ha leído, entonces lamentablemente es cuando todo el razonamiendo quedaría invalidado sin más remedio por fraudulento y lo que es peor, afecta a todo el resto del discurso en la duda de credibilidad que crea. Estoy seguro que no es el caso.
ResponderEliminarCuchillero
Gracias de nuevo cuchillero. No no es el caso. No soy cirujano plástico pero si ortopédico y cuando ejercía era una disputa algo más que académica si este tipo de cirugia era nuestra o de los plásticos. Sigo opinando que de quién mejor sepa hacerlo y si es en equipo multidisciplinar mejor.
ResponderEliminarSaludos
Saludos para tí también. Si no os importa, seguiré el blog que habeís creado, es interesante sin duda. Pero ya te habrás dado cuenta que tiendo a participar, siempre desde la educación y el respeto, con toda intensidad.
ResponderEliminarYo también soy cirujano.
Cuchillero
Bienvenido Cuchillero, es un honor que nos sigas. Gracias por participar, aunque supongo que te defraudaremos muchas veces, aunque intentaremos esforzarnos para que no sea en demasiadas ocasiones.
ResponderEliminarGracias. No creo que vayaís a defraudar porque no es vuestra intención. Si podeís decepcionarme, pero entonces el problema será mas mío que vuestro.
ResponderEliminarSobre este tema económico os aconsejo la lectura de este artículo del New York Times. Paul Krugman tiene su columna semanal que creo que es de lectura esencial para los interesados en el tema.
http://www.nytimes.com/2011/01/16/magazine/16Europe-t.html?pagewanted=1&ref=homepage&src=me
Saludos
Cuchillero
Gracias Cuchillero. Muy interesante -y en mi opinión bastante acertado- el articulo de Krugman. Creo que nos esperan tiempos muy duros
ResponderEliminar